
En un restaurante, escuché a una cliente solicitar un cambio de plato, "si aún estaba a tiempo". El camarero, amablemente, le dijo que no era posible "porqué ya lo había entrado en el ordenador".
"Pues puñetas", pensé yo, ¿Por qué no ponéis una programación que permita los cambios?, que no es tan difícil. (Ya ven que tiende a irritarme un poco los errores que tienen que ver con la mala praxis comercial, seguro que yo también los cometo, pero bueno:)
Y sobre todo teniendo en cuenta que el nivel de rotación que tienen es grande, con lo que seguro, que incluso si alguien cambia el pedido, pronto será pedido por otra persona, segurísimo.
En fin, que no aprendemos que para perder clientes, no hay nada mejor que "mantener a nuestro cliente.. insatisfecho"
CANCIÓN "KEEP YOUR COSTUMER SATISFIED" cantada por SIMON AND GARFUNKEL.